COMPARAMOS.

Aunque las tres historias tienen al amor como protagonista, cada una de ellas tiene características propias.

En la Celestina, se refleja un amor loco y apasionado en Calisto y Melibea, Shakespeare optó por plasmar entre las líneas de su obra teatral un amor apasionado, pero finalmente trágico y Federico Moccia cuenta la historia de un amor prohibido entre dos jóvenes.

Se escribieron en épocas muy diferentes por lo que los cambios sociales se ven reflejados en sus historias.
Tanto en la Celestina como en Romeo y Julieta, los amantes acaban muriendo por amor, pero existe una diferencia:
Romeo y Julieta se suicidan por amor, Romeo ve a  Julieta bajo los efectos de la poción y  se suicida ante el supuesto cadáver, ésta despierta, ve a Romeo sin vida y decide acabar con la suya también.
En cambio, Melibea se suicida tras ver el difunto cuerpo de Calisto en el suelo, tras sufrir un accicente. Pero, como dice Martín Casariego, ``Hubiera hecho lo mismo éste en el caso contrario ´´. 

Los protagonistas de los tres relatos, son jóvenes que se encuentran en la flor de la vida. Shakespeare y Fernando de Rojas deciden plasmar en sus historias las características del primer amor, que en general es el más honesto y el más puro. 

En los tres relatos, los jóvenes encuentran la oposición de sus familias para estar juntos, por ello, todos ellos reflejan que en todas las épocas la juventud choca con los valores y los principios de la generación anterior, y que el amor mueve montañas e incluso puede llegar a oponer a los amantes con familias.
Por suerte los amantes cuentan con personas que les apoyan y les ayudaran a conseguirlo, es el caso de el famoso papel de la Celestina en la obra de Fernando de Rojas, de Benvolio, el primo y amigo de Romeo en la historia de Shakespeare y el mejor amigo de Hache que es ``Pollo´´.